Los ministros de Telecomunicaciones de la Unión Europea (UE) ha aprobado el recorte de las tarifas mayoristas de los mensajes a móviles (SMS) enviados desde el extranjero de una media de 0,29 euros a un máximo de 0,11 euros (sin IVA), y de los datos descargados a un euro por megabyte.
Con esta medida, que empezará a aplicarse el 1 de julio de 2009, los ciudadanos comunitarios que viajen a otros países de la UE pagarán un máximo de 11 céntimos de euro por SMS, frente a la media comunitaria actual de 29 céntimos. En el caso de España, el precio medio en estos momentos es todavía más elevado, de 40 céntimos.
España, que se abstuvo en la votación, y la República Checa se pronunciaron en contra de la propuesta al considerar que puede llevar a los operadores a subir el precio de otros servicios. "Resulta inaudito el atrevimiento de intervención en precios minoristas", afirmó el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros.
Como ya hizo con las llamadas, Bruselas sugiere imponer un coste máximo por los mensajes enviados y por acceder a Internet con el móvil desde otro país, para lo que propone que los operadores ofrezcan a los abonados la posibilidad de solicitar el corte del servicio de descarga de datos cuando vayan a sobrepasar un límite de 50 euros.
Además, Bruselas obligará a las compañías telefónicas a facturar por segundos y no por minutos todas las llamadas en itinerancia, tanto las realizadas como las recibidas, a partir del segundo 31. Hoy en día, los usuarios pagan un 24% más de los minutos utilizados al hacer llamadas y un 19% más en el caso de las llamadas recibidas.